Rocafort



ROCAFORT, LA ROSA DEL TIEMPO
¿Serán bienvenidos nuestros ojos que profanan el sosiego de las ruinas? Sólo el corazón sabe que el misterio está en seguir siendo misteriosa la respuesta y en perseverar sobre el encuentro que se ansía y se teme al tiempo. Las puertas francas a la hospitalidad, como bocas que gritan piedad de vivos:“venid... venid y entrad...” Nos dicen las hojas de madera huérfanas de toque de nudillos que las alerten que ha llegado al hogar un extraño o un amigo.
“¡Ya están aquí!..”

Rocafort es un pequeño despoblado perteneciente al municipio de San Esteban de Litera, está ubicado en
pleno corazón de la comarca de La Litera, en lo alto de una colina al borde del barranco de Olrriols.

Lo primero que llama la atención en Rocafort es que varias de sus 8 casas están alineadas con los ventanales orientados hacia el sur, formando una gran muralla, lo hacían porque así podían atrapar la luz solar más fácilmente.  Rocafort nunca llegó a tener la luz eléctrica, el pueblo se apagó antes.

La iglesia parroquial de San Miguel es de estilo barroco, data del Siglo XVIII y presenta una sola nave, ábside plano y una pequeña espadaña en la puerta de entrada.

Iglesia
 Rocafort llegó a censar hasta 63 habitantes en el año 1920, medio siglo después, fue deshabitado.En las cercanías de Rocafort hay una ermita que esta dedicada a La Virgen de Guardia, fue restaurada en el año 1992.

LOS ULTIMOS DE ROCAFORT
El último bautizo: el 29 de abril de 1.961
Mercedes Cosialls Ariño
La última boda: el 21 de septiembre de 1.969
Eduardo Frago Sistac & Araceli Montanuy Colomina
El último entierro: el 19 de octubre de 1.962
Joaquim Dergua Sin

Vistas desde la ermita
En Rocafort no hay gente por una maldición, alguien maldijo el pueblo y al día siguiente la charca que había en medio del pueblo se secó, además por las noches se oía un carro en el que iba la muerte montada, hasta había gente que dijo que pudo ver este carruaje. La gente cogió miedo y se marcho del pueblo...


Antigua balsa

En la orilla de la antigua balsa, crecen tres árboles monumentales, de los más notables de España en su especie, el almez o litonero. El mayor de ellos es este que encontramos frente a la iglesia y que tiene una altura de 14 metros, Los tres están en la lista de árboles protegidos de Aragón.





Curiosidad
-Cerca de donde dejaremos el coche verás una edificación moderna que sirve para acoger las comilonas de la Sociedad de Cazadores. Al lado de la puerta hay una ventana protegida por una reja hecha con barras de acero corrugado. Cuenta el numero de barras verticales que forman esa reja.
A = suma de los dos dígitos que forman el numero de barras verticales que forman la verja.
-Al entrar en la iglesia de Rocafort, en la última columna de la parte derecha, antes de llegar a la esquina, veremos un numero romano pintado debajo del capitel.
D=  suma de los digitos que forman el número cardinal indicado por el numero romano presente en la columna.
-Cuenta el número de capillas laterales que existen la iglesia.
E= número de capillas laterales en la iglesia de Rocafort.
-Mira bien la fachada de entrada de la iglesia de Rocafort y cuenta cuantas hornacinas existen.
F= número de hornacinas presentes en la fachada principal de la iglesia de Rocafort.
-La entrada de la ermita de la Virgen de  Guardia esta protegida por un porche. Cuenta las vigas de madera que aguantan el tejado a dos aguas de ese porche.
B = número de vigas que soportan el tejado de la ermita.
-En cada una de las puertas de la ermita veras muchas cabezas de clavos grandes de herrero. Estos clavos forman tres alineaciones horizontales y una vertical. Cuenta las cabezas de clavo que forman la alineación vertical .
C=  suma de los dos dígitos que forman el numero de clavos presentes en la alineación vertical más larga de una cualquiera de las dos puertas.
Las coordenadas del geocaché son:
N 41° 54.(B-A)(A+C)(F-C)'  
E 0° 22.B(D+F)(E-D)'




Otros cuentan que por estos pueblos abandonados existe la tradición que se aparecen algunas Lumbretas. Las lumbretas o almetas son almas en pena que vagan por la tierra sin poder llegar al purgatorio. Se les describen portando vestidos blancos y luces, en procesión como a Santa Compaña gallega.

Para librarse de ellas dicen que lo mejor es lanzarles una piedra foradada, o si descubrimos su tumba comer una buena cena encima de ella. También, la noche de Todos los Santos se les dejaba un plato de alubias, para que las almetas separaran tantas alubias como misas querían que se les hicieran.

Un paseo por Rocafort
El carré plleno de enrunes y cascoz


Sí, ya hemos llegado del mundo de las sombras y apenas hemos podido cruzar los umbrales, entrevista la quietud de los zaguanes donde mueren lentos desangrados de arena los ecos antiguos, rotos en mil pedazos. Ecos que entre escombros siguen pidiendo agua para la sed o migas de paz, o granos para el pan de los siglos que se escurre entre los dinteles añiles donde juega el eco extraño de un pincel mozárabe trazando alegre el arco de la puerta o la ventana...
De los balcones desprendidos ya no se asoma nadie a la tibieza de la noche o al pálido reflejo de la luna...“Ya no están”... dicen las hornacinas vacías y extrañadas como bocas abiertas en las paredes del silencio.
Ya no están aquí...
Aunque sean miradas las largas grietas,
ya nadie os mira tras los postigos,
ni tras las rejas...
La cunete no vol desapareixe encare

Ni tras las rejas de flores de hierro, que perfuman de óxido la eterna primavera de las tristes ruinas. Ni están en el alfeizar de las ventanas los gatos al sol que resbala de la ladera. Y aunque aún el aire venga a mecer la rota cuna que se balancea en lo alto de la alcoba, no hay balbuceos de niños, ni gordezuelas manos agarradas al azul pálido de la madera. Tampoco de las cocinas el aroma de otros tiempos nos invita a detenernos, los fogones no tiznan ya ni de tristeza, y los azulejos añosos a la intemperie dejan resbalar el polvo como la harina de otro molino.
Rocafort existe aún...
¡Sálvanos del olvido!
¡Llévanos en la retina
La Iglesia


Rocafort. ¿Por qué tu nombre es tan frágil como el adobe que se desmorona igual que la montaña? ¿Qué permanecerá de ti si ese litonero guardián de la entrada de tu iglesia se convierte en madera para otro hogar lejano y con vida? Serás leyenda de libro y recuerdo si alguien no rescata de tus escombros el alma perdida de tu gente. ¿Dónde habitan tus vecinos...? ¿Ya nadie te quiere, ni los que han nacido tras los muros que se mueren por la lepra de las ruinas? Si no los mató el hambre ni el frío, ni la distancia al agua ni al trigo... ¿porqué te olvidan?


cuando los calendarios, sin piedad,
Ya no queda tiempo.
Las casas muertas más se mueren
arrancan los días a golpe de viento.






  


El cementerio
He arrancado ramitas de arbusto, florecillas como botones amarillos, algunas minúsculas lilas y espigas del camino del cementerio. Aquí yacen los más solitarios de la tierra. Sospecho que ya ni se hablaban antes de nuestra visita. Las he puesto junto a la cruz oxidada que los bendice en el centro del pequeño camposanto. Sólo con ellos he hablado breve para pedir perdón por la molestia y rogar que sigan soñando su sueño: la resurrección.

He dejado atrás ese paraíso desplomado sobre sí mismo... Como un arco mordido en el costado, encallado en la arena. Como una escultura de arenisca que lame la erosión con paciencia. He pronunciado de nuevo Rocafort y me han respondido muchas voces:
“Lo que se ama permanece escrito en la tierra..."
Ermita de la Virgen de Guardia
Sobre el pueblo se alza la ermita de la Virgen de La Guardia, que dependió de los monjes de Alaón. Esta ermita, reconstruída en el año 1992, se asienta sobre una antigua románica, de la que queda tímido vestigio del arranque del ábside.
Ha  mantenido la orientación primitiva y recibe una romería anual. Se ha especulado con que alrededor de dicha ermita, hubiese estado el primer asentamiento que fundaría el pueblo más abajo.
Folklore popular de La Litera: los gozos

Los gozos son canciones religiosas dentro generalmente, del ciclo de otoño de carácter popular y contenido rogativo. Aunque existen gozos en toda España es en el ámbito aragonés, catalán y valenciano los territorios en los que se encuentra un mayor número.
Generalmente recogen la vida y milagros de Cristo, Virgen o santo o santa al que están dedicados como en los Gozos de San Roque (Albelda), los Gozos a San Millán y la Virgen de Vilet (Gabasa), los gozos a los Ínclitos Santos Quilez y Julita (Estopiñán) y los ya mencionados  Gozos de los Santos Mártires Abdón y
Senén (Camporrells). El contenido narrativo está estructurado en las coplas con un carácter de escenificación similar al de los retablos y con la misma finalidad: el relato de la vida y de los milagros a los que se refiere el gozo (excepcionalmente se puede encontrar la representación iconográfica e impresa de estas escenas.
Las apariciones de imágenes de la Virgen son muy frecuentes en toda la geografía aragonesa y, en consecuencia, se conservan numerosos mariológicos (Gozos de Nuestra Señora de la Guardia en Rocafort, Gozos de Nuestra Señora de la Mora en Peralta de la Sal, Gozos de Nuestra Señora de la Ganza en Calasanz, Gozos de la Virgen de la Vilavella en Baldellou y Gozos a la Virgen de Vilet en Gabasa). El carácter rogativo aparece con claridad y de forma muy amplia, solicitando “amparo y benignitat” (Goigs en honor de Santa Ana en Pinyana) ante “cualquiera mal o dolencia” (Gozos de Nuestra Señora de la Mora en Peralta de la Sal) e incluyendo los ruegos de bienes terrenales (“dolencia”, “angustia”, “cuidar de los campos” en los Gozos de las Santas Reliquias en Castillonroy, “frío, escarcha y helada... piedra, rayo, tronada” en los Gozos de Santo Toribio en Baells) y espirituales (alejarse del pecado). En el texto de los Gozos a Nuestra Señora del Patrocinio, y también en Tamarite en los Gozos de Santa Quiteria, destaca el carácter de protección especial que tiene la devoción que los inspira. La petición de amparo y protección que contienen, se refiere no sólo a peligros presentes en un pasado histórico, sino a peligros actuales. Un elemento destacado en los primeros es la indeterminación temporal de los hechos a los que se refieren. El relato, conservado durante generaciones, forma parte de la memoria colectiva que nunca ha necesitado de mayor concreción en los hechos narrados, los cuales adquieren así un valor muy superior al que obtendrían por medio de pruebas documentales o de otro tipo. Los gozos son cantados en todo tipo de celebración religiosa, pero de forma especial son elegidos en aquellos actos relacionados con la advocación a la que se refieren. Son formas poéticas sencillas. Tienen una “introducción”, llamada en algunos sitios “endessa”. A continuación se alterna las “estrofas” o “coplas” con el “estribillo” y se finaliza con la “tornada”. Los versos son octosílabos y la rima es asonante o consonante según las necesidades del texto. No suele haber versos libres en su terminación. Los recursos poéticos suelen ser muy abundantes ya que el aspecto de narración y de expresión de sentimientos es esencial en el texto. Las modificaciones sufridas en la melodía de estos gozos responden a la participación creativa de los intérpretes, considerando a éstos como una colectividad con una intervención doble en la autoría y en la interpretación, lo cual proporciona el dinamismo  característico de esta forma popular.

TORRE BELLET

Torre Bellet es muy probable que tome el nombre de algún antiguo propietario de apellido Bellet. Sus orígenes son muy antiguos. En sus alrededores hay cuevas de difícil acceso que podrían remontarse al Paleolítico.
También existe la teoría que fue ocupada en la Edad del Cobre por tribus ilergetes de cultura ibérica que a medianos del siglo V a. C. se instalaron en la parte sur de lo que hoy representa la provincia de Lérida. Posteriormente fue una de tantas torres en las que residían, de forma continuada, familias dedicadas a la agricultura y al ganado. 
Sin duda se trata de los restos de una fortificación árabe. Si bien hay estudiosos que sostienen que, en lo que se refiere a las cuevas existentes, podrían remontarse al paleolítico.